“En poco más de 6 meses alcanzamos el 100% de operatividad”, continúa Paulo Correia. El bote “P2lean”, sobre todo, fue una inversión significativa para nosotros. Hoy nos permite ser siempre flexibles, producir rápidamente, con alta calidad y siempre constante: podemos producir 1 pieza o 1000 piezas, sin ningún problema, con un plazo de entrega muy corto. Previamente podíamos estimar, para un lote de 30 muebles metálicos, un tiempo de entrega de 2 semanas entre preparación, programación, corte de material, plegado, soldadura. Hoy podemos hacer el mismo lote en 2, 3 días como máximo. Otro gran resultado es haber eliminado prácticamente los trabajos en curso: en el pasado solíamos almacenar productos semiacabados en varios puntos de la fábrica porque teníamos que gestionar la producción, organizarla en los días posteriores, en función de la relación entre máquinas herramienta, materiales y espesores. Hoy producimos con un fundente intenso: el mismo día cortamos, completamos el plegado y enviamos todo a soldadura. Minimizamos los tiempos de espera que hicieron menos eficiente nuestro flujo de producción y eliminamos el fenómeno de pérdida de productos semiacabados. En el pasado, no teníamos grandes problemas con los incumplimientos, pero teníamos que dedicar mucho tiempo a reelaborar para compensar los incumplimientos. Aproximadamente el 30% de nuestra recuperación de eficiencia actual se debe precisamente a la reducción de las actividades de retrabajo: la pieza se fabrica inmediatamente correctamente, no es necesario rehacerla, no es necesario volver a los pasos de procesamiento anteriores para corregirla. En resumen, controlamos mejor el proceso en todo momento ”.